La seguridad es una auténtica prioridad en nuestros proyectos. Esta mentalidad se aplica desde la evaluación de una nueva aplicación de purificación, pasando por la fabricación y el envasado de nuestros productos hasta su entrega. Nuestro objetivo es aplicar las normas más estrictas en las fábricas, así como en las instalaciones de los subcontratistas y clientes, y promover la cultura de la seguridad.
Nuestros especialistas, en colaboración con sus departamentos técnicos, examinarán rigurosamente todos los requisitos previos necesarios para un perfecto control de las operaciones (REACH, FDS, pruebas de corrosión y estabilidad térmica, índice toxicológico INERIS, explosividad y dispersión atmosférica, clasificación ICPE, transporte ADR, EPI, etc.). Tras las pruebas de Kilo-Lab y/o piloto, las operaciones se realizaran por personal altamente cualificado, y adecuado para manipulación de productos químicos en instalaciones optimizadas, y apropiadas a los productos más difíciles. La logística, que se lleva a cabo en gran parte con nuestra propia flota de isotanques, está supervisada por nuestro asesor de seguridad de mercancías peligrosas.
Speichim y Valls Química están muy implicados en la promoción de la seguridad a nivel sectorial:
- Integración en la asociación de :
A nivel interno, estamos aplicando programas plurianuales para fomentar y desarrollar la seguridad en nuestros equipos. Esto nos permite comprender activamente los cambios en nuestra sociedad y seguir de cerca el contexto medioambiental, social, económico, jurídico y de gestión en el que evolucionan nuestros socios, subcontratistas, clientes y nosotros mismos.
Mantenernos constantemente informados y en sintonía nos conocer cualquier información relacionada con nuestro sector y aplicarlo en nuestra actividad diaria.